Desearía poder volar
y así llevarte en mis brazos
a las nubes más lejanas
de este suelo.
A un mundo de ensueño
al lugar más dulce del arcoíris
donde hay miel y caramelo
y donde la música sea tu voz.
Tomar miles de estrellas
y traerlas a ti hechas diamantes.
Una cama, dulce nube de algodón.
Deliciosas e infinitas noches de amor...
Hermosa psicodelia...
A un lugar donde sólo nosotros conocemos
nuestro propio Neverland
donde la brisa tiene tu olor,
delicado perfume de amor,
y tus ojos de cristal son mis astros.
El volumen de mi corazón...
Hermosa y dulce psicodelia...
Y mientras el cielo otoñal nos invada
nos fusionemos en una mirada.
Nuestros corazones se hacen Uno
los segundos no existen
siglos de amor que no tienen fin.
Dulce y hermosa psicodelia de amor...
Y todo esto
en una suave caricia
en un tierno abrazo
en un eterno beso tuyo.
Caro